'Aisha narró: Entonces, él dijo: "¡Oh Allah! Perdona a Aisha sus pecados pasados y futuros, lo que ha ocultado, así como lo que ella ha puesto al descubierto"
Así que, comencé a sonreir, hasta el punto que mi cabeza cayó en mi regazo llena de alegría. Y el Mensajero de Allah me dijo: "¿Mi súplica te hace feliz? Yo le respondí: "¿Y cómo puedes tu súplica no hacerme feliz?" Entonces él me dijo: "Por Allah, es la súplica que hago para mi nación, en cada oración""
Reportado en Sahih Mawarid adh-Dhaman