Relató el Emir de los Creyentes Abu Hafs 'umar Ibn Al Jattab -que Allah esté complacido con él: He oído al Mensajero de Allah -salla Allahu 'alayhi wa sallam- que decía:
"Ciertamente las obras dependen de las intenciones, y cada hombre tendrá según su intención, así, aquel que emigra por Allah y Su Mensajero, su emigración fue por Allah y Su Mensajero, y aquel cuya emigración fue por conseguir algún beneficio mundanal o por tomar alguna mujer en matrimonio, su emigración fue para aquello por lo que emigró" Al-Bukhari y Muslim.
En el Islam se considera la intención como la balanza con la que se miden las acciones. Si la intención es buena, Allah recompensa por ella y si la intención es mala, Allah también recompensa por ella.
La intención es necesaria para la validez de todos los actos obligatorios en el Islam.